Parador de Santiago de Compostela - Santiago de Compostela, A Coruña

Josu Z

Alojamiento en Parador Museo, al llegar te ofrecen guía en papel para tu propia visita al Parador. Habitaciones muy confortables, pero frías por la noche, pedimos manta extra y con climatizador sin problemas. Ambos restaurantes muy buenos, estupenda atención de Katia.

Isabel Amores Garcia

Llevaba mucho tiempo queriendo visitar este Parador y, la verdad, me ha decepcionado un poco.
La ubicación es excepcional, aunque solo haya 5 habitaciones con vistas a la plaza (según me informaron).
Tampoco había plazas de aparcamiento (también me dijeron que sólo había 5 ó 6), por lo que hay que dejar el coche en un aparcamiento público cercano.
La habitación estaba muy bien, aunque el colchón es incómodo, excesivamente firme.
Comimos en el Enxebre, y estuvo regular. La merluza a la gallega excepcional, el pulpo y las xoubas, flojos.
El personal es atento.
Estaban en obras.
Conozco el 70% de los paradores nacionales y en este caso, para ser un cinco estrellas gran lujo, esperaba algo más.

Fátima González

El entorno es incomparable, es un sitio muy especial y su ubicación es perfecta.

Sin embargo, nuestra habitación estaba infectada por una plaga de chinches, los insoportables picores no nos dejaron dormir ni un día (nos alojamos una semana), y nos dijeron que eran muy difíciles de exterminar. Tampoco nos quisieron devolver el dinero de la habitación, ni reembolso parcial, ofrecieron una compensación que nunca llegó. Inadmisible teniendo en cuenta el alto precio de este parador por noche.

Juanito 82

La ubicación es perfecta para el fin que tiene visitar Santiago de Compostela.

Las 5 estrellas GL, le quedan bastante pero bastante grande, se podría encuadrar con más exactitud en un 4 estrellas. Las habitaciones (salvo los baños) están muy deterioradas, la accesibilidad para las playas superiores es muy mala, sobre todo en las habitaciones que están al fondo del edificio.

La gastronomía es aceptable, la falta de calidad de los alimentos los suple el equipo de cocina que tiene este hospedaje.

La atención y el buen hacer de todo el personal, ha sido perfecto.

Ernesto García Rosales

Mejorables las instalaciones, que están un poco anticuadas, pero entorno único y trato por parte del personal excelente.
El menú degustación es un reflejo de la cocina tradicional de Paradores: nos gustó mucho. Además, el maridaje era impecable.
El desayuno estupendo, hacen su propia tarta de Santiago que calificaría de las mejores que he probado.
Recomendamos la experiencia piano, perderse por los claustros y meditar cada minuto que pases en este Parador.

Alberto Hervas

Este parador tiene una atención, con los 10 primeros peregrinos que se presenten en la Oficina del Peregrino todos los días, en obsequiarles con el almuerzo gratuito ese día.
Resultó que el pasado 31 de octubre fuí uno de los 10 peregrinos agraciados. El menú que nos sirvieron no es mejor que el rancho de un cuartel en los años 70. Un caldo gallego que era agua con cierto sabor, sobre la que sobrenadaba alguna verdura, sin una patata y 3 alubias ( en cualquier bar del Camino, por humilde que sea, sirven mejor caldo gallego). Un arroz de costilla de cerdo y un trozo de torta de Santiago más dura que un adoquín. Vino de mesa peleón
Creo que el Parador se lo debe hacer mirar, ya que si lo que pretende es un detalle altruista con los peregrinos, estos se merecen un menú "DIGNO", ya que dudo que este almuerzo se lo pongan a los clientes que se alojan en este establecimiento de 5 estrellas.
La dirección del Parador esta poniendo en entredicho su imagen, la de todos los Paradores en general y la marca ESPAÑA en el extranjero, ya que de los 10 peregrinos ese día, 6 eran de otros países. ¡¡¡¡ Con la excelente cocina que tenemos en España !!!
Una persona que hace el Camino de Santiago es un "PEREGRINO", no un muerto de hambre.

Virginia Perez

Precioso Parador, un hotel de 5 estrellas. Habitaciones amplias, dos restaurantes y una cafetería. 4 patios interiores ajardinados. Era un antiguo hospital ordenado construir por los Reyes Católicos, pero a mediados del siglo XX lo conviertieron en hospedaje. Está en plena Plaza del Obradoiro, junto a la Catedral. Muy bonito. Desayuno buffet con muchas opciones, tienen leche sin lactosa y de soja, las normales y pan y galletas sin gluten. Los botones, las chicas de recepción, los camareros de los desayunos, la cafetería y los restaurantes...son encantadores. Recomiendo, aunque haya que ahorrar una temporadita para pasar allí un fin de semana, merece mucho la pena.

Ana R

Nos hemos alojado en este hermoso parador y la experiencia ha sido excepcional , la belleza del parador y su entorno. El personal muy amable y atento.